Creo que no había dedicado ninguna entrada a la cacerola para cebollas que compré en Vinçon. Había más grandes (¿y más pequeñas?) para patatas, y otros alimentos que no recuerdo. En fin, que la de cebollas de color crema fue la que más me gustó, aunque no descarto comprar alguna más. Claro que ahora mismo no tiene cebollas dentro porque es algo que apenas uso y acabarían echándose a perder. Por cierto, los ojos más atentos, habrán visto que el primer libro de debajo se titula: "A zombie ate my cupcake!". Un regalo de Mina al que dedicaré una tarde de creación de cupcakes ¡pronto!
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